¿Cómo limpio mis paneles solares? 🤔 ¡Aquí te lo contamos!
Lo primero que debes tener en cuenta es el acceso. Si tus paneles están en el tejado y en lugares poco accesibles, te recomendamos siempre llamar a una empresa de mantenimiento para, además de limpiar toda la instalación correctamente, que la revisen y garanticen que todo está funcionando correctamente.
Mantener las placas solares limpias es crucial. Con el tiempo, las placas pueden acumular polvo, suciedad y otros residuos que bloquean la luz solar, reduciendo su eficiencia. Una limpieza regular, siempre que sea posible, es una tarea simple que puede maximizar el rendimiento de tu inversión.
¿Cómo limpiar tus placas solares?
–Usa agua y un paño suave. El agua es la herramienta más sencilla y segura para limpiar las placas. Usa un paño de microfibra o un trapo suave para evitar rayar la superficie. Humedece el paño con agua tibia y limpia suavemente la superficie de las placas.
–Manguera de agua: Si la placas están muy sucias, puedes utilizar una manguera para enjuagar el polvo o suciedad más gruesa. Asegúrate de no usar presión excesiva, ya que esto podría dañar los paneles.
–Evita productos químicos: No utilices detergentes fuertes, limpiadores abrasivos o productos químicos que puedan dañar la superficie del panel. Estos productos pueden dejar residuos que interfieren con la capacidad de capturar energía solar y dañar los materiales con los que están fabricadas las placas
–Limpieza en momentos adecuados: Es mejor limpiar tus placas solares a primera hora de la mañana o al final de la tarde, cuando están frías. Evita hacerlo cuando están muy calientes, ya que el cambio brusco de temperatura podría dañar el cristal.
–Precaución al acceder al techo: recuerda, si necesitas subir al techo para limpiar tus placas, es mejor llamar a un profesional que realice la limpieza. Únicamente recomendamos que se limpien las placas en caso de estar en una azotea o en tejados accesibles donde no exista ningún riesgo para la persona.
Recuerda que, aunque la limpieza regular es esencial, no es necesario hacerlo en exceso. Un par de veces al año suele ser suficiente, pero si vives en un área con mucha contaminación, polvo o polvo industrial, es posible que necesites limpiar tus paneles con mayor frecuencia.