Un panel solar, también conocido como placa solar, es un dispositivo que capta la energía producida por la radiación solar para producir electricidad. Hay diferentes tipos de paneles solares que producen electricidad de formas distintas.
Tipos de paneles solares
Los paneles solares fotovoltaicos o placas fotovoltaicas constan de numerosas celdas que convierten la luz solar en electricidad. Estas células se llaman células fotovoltaicas. Este tipo de panel funciona por el llamado efecto fotovoltaico, donde la energía lumínica (los fotones) genera cargas positivas y negativas en dos semiconductores próximos de diferente tipo, produciendo así un campo eléctrico capaz de generar una corriente.
Los colectores solares o captadores solares son unos dispositivos en los que hay un líquido que absorbe la energía solar almacenando su calor. La placa consta de un sistema de conductos por los que circula el fluido. Una vez esté caliente, este líquido pasa a un compartimento de almacenamiento de calor y posteriormente a un intercambiador de calor, donde cede su temperatura al agua para su uso doméstico. Después de este proceso, el líquido frío vuelve a circular por el colector solar.
Tipos de células
El arseniuro de galio y el silicio son los materiales más utilizados para fabricar células fotovoltaicas. Las células más utilizadas son las de silicio, que conllevan un menor coste económico. Existen tres tipos principales de células fotovoltaicas de silicio:
- Células de silicio amorfo: son las más baratas pero también las que ofrecen menor rendimiento de todas. Por eso y porque no necesitan exposición directa a la radiación solar de manera perpendicular, estas células se usan en dispositivos pequeños como calculadoras o relojes.
- Células de silicio monocristalino: constan de un único cristal de silicio laminado finamente y se caracterizan por su color azul uniforme. Al ser las más avanzadas, tienen un coste de fabricación mayor a las demás pero también proporcionan un rendimiento superior bajo ciertas condiciones.
- Células de silicio policristalino: similares a las de silicio policristalino, también son de un color azul, aunque no uniforme. Están formadas por varios cristales en vez de una sola lámina, por lo que tienen un rendimiento algo inferior al de las células de silicio monocristalino.
¿Para qué se usa un panel solar?
Originalmente fueron creados para la industria aeroespacial, pero aquí en la Tierra se usan como una alternativa ecológica a las energías no renovables. Abastecen tanto a casas aisladas de la red eléctrica como a viviendas cuyos dueños no quieren depender de compañías eléctricas. También producen electricidad a gran escala en parques fotovoltaicos a través de redes de distribución.
Experimentalmente, también se está probando a usar la energía solar para dar energía a vehículos solares sin necesidad de ser conectados a la red eléctrica.
La producción de paneles solares continúa al alza año tras año y cada vez más familias y empresas deciden pasarse a la energía solar gracias a la ayuda de programas de incentivos económicos por parte del gobierno con el objetivo de reducir nuestras emisiones de gases de efecto invernadero.
El coste de los paneles solares ha disminuido significativamente desde que empezó su fabricación y ahora su coste medio ya es competitivo con las fuentes de energía no renovables convencionales en muchas zonas geográficas. Por eso, consideramos que pasarse a la energía solar es una buenísima opción tanto desde el punto de vista ecológico como el del económico.